El valor del dinero no
siempre ha sido el mismo, es muy cambiante, épocas donde vale más y épocas en
las que se deprecia. En su origen, el dinero era sustituido por una cantidad de
metal precioso equivalente. El usado era el llamado Patrón oro, por lo
que cada pieza de metal equivale a una cantidad determinada y fija de
dicho metal. En los 70, EEUU se desbancó
de este sistema tan obsoleto y creó su propio sistema, el curso legal,
sistema que todos los países siguen actualmente.
El sistema trata de que
el gobierno del país crea unos papeles un número determinado, que sería el
valor y denominándolos dinero. Este no tiene ningún valor en realidad, pero las
personas aceptamos este dinero como algo con valor confiando que gracias a ello
podemos adquirir bienes y servicios para satisfacer nuestras necesidades.
El gobierno tiene el
poder de administrar cuánto dinero se pueden hacer y que pueden estar en
circulación, utilizando un control exhaustivo para que dicho dinero no pierda
valor, es decir no se devalúe. Si esto ocurre, el país con dicha moneda perderá
riqueza, y lo que podría valer hace dos días un billete, podría perder la mitad
de su valor, esto puede ser causante del aumento en la demanda de monedas
extranjeras o al revés una baja demanda de la moneda propia.
Es clave que ese
control sea minucioso, ya que las consecuencias pueden ser gravísimas en cuanto
a las exportaciones y las importaciones, encareciéndolas y teniendo que
invertir más dinero si se quiere obtener un producto o un servicio de otro país.
Si quieren acudir a una exposición dedicada expresamente a este tema, pueden ir al Museo Arqueológico Nacional ( www.man.es). C/
Serrano, 13. 28001 Madrid
No hay comentarios:
Publicar un comentario